Cómo dice el dicho:» la basura de unos es el tesoro de otros», y en esté caso es así. Me he encontrado en la misma una vieja ventana sin cristal. La observé detenidamente y no estaba rota, tan sólo estaba deteriorada. Por lo que me la he llevado para casa para hacer algo con ella, no sabía el que pero algo se me ocurriría.
Y ha llegado el momento de darle una segunda oportunidad. Después de pensar un poco y consultar en internet, he decidido realizar un sencillo, práctico y económico espejo con ella. Por lo que voy a convertir una ventana a espejo.
Además, las herramientas necesarias son muy pocas y bastantes comunes. Por lo que de está forma podremos obtener y disfrutar, después de la transformación, de un bonito y práctico espejo para nuestro baño, salón…
Y seguro que a tí te quedará más bonita que a mí, ya que la decoración, la combinación de colores… no es mí fuerte aunque trabajo en ello para mejorar.
Materiales
- ventana antigua
- cancamos cerrados
- tapaporos o sellante
- barniz, pintura…
- espejo
- masilla para madera
- tacha o clavos
Herramientas
- metro
- lápiz
- destornilladores planos y/o de estrella o estria
- martillo
- tenazas
- formón (opcional)
- lijadora
- diamante para cortar cristal
- brocha o rodillo
Cómo convertir una ventana a espejo.
Nota importante: deberemos usar todas las medidas necesarias para realizar la faena de forma segura: guantes, gafas, protectores de oídos…
1. Partiendo de una vieja ventana, que su destino iba a ser la basura, vamos a convertirla en un espejo. Es una operación sencilla, fácil y rápida.
2. Comenzamos por retirar todos los accesorios atornillados que pueda tener: bisagras, sistemas de cierre…
3. A continuación, retiramos los junquillos. Son unas pequeñas tiras de madera que tiene clavadas en una cara de la ventana, y que su función es retener el cristal. Para quitarlos usaremos un formón, destonillador de pala plana… y deberemos tener cuidado para no romperlos.
4. Deberemos retirar las viejas tachas o clavos de los junquillos. Para ello usaremos el martillo y unas tenazas o alicates.
5. Lijaremos la madera con una lijadora. Deberemos lijar tanto la ventana como los junquillos. Cuando terminemos, limpiaremos bien todas las piezas.
6. Usando una masilla para madera, taparemos los agujeros donde estaban atornillados los accesorios que retiramos: bisagras, sistemas de cierre…
7. Aplicamos tapaporos o sellante según queramos embarnizar o pintar el futuro espejo. En mí caso, he aplicado tapaporos para posteriormente embarnizar.
8. Medimos el hueco de la ventana por donde van colocados los junquillos para comprar o cortar el espejo. A esa medida descuentale unos milímetros para que no tengas problemas al momento de colocarlo. También puedes cortarlo en casa, si quieres saber como, pincha aquí.
A continuación, colocamos el cristal y lo sujetamos al hueco de la ventana con los junquillos. A su vez estos junquillos se sujetarán a la misma mediante tachas o clavos. Para no tener peligro de romper el cristal, colocaremos un trozo de cartón para clavar las tachas o clavos.
9. Para sujetar el espejo a la pared, podemos colocarle unos cancamos cerrados a la trasera del mismo. Con colocar 2 en cada extremo, serán más que suficientes.
10. Y de está forma tan sencilla, podemos convertir una antigua ventana en un espejo.
Te dejó un vídeo con el proceso de cómo convertir una ventana a espejo.
¿Qué te parece la transformación?
Un saludo y hasta el próximo proyecto.