¿Que sistema elegir para tener agua caliente en casa?

Para una correcta elección del sistema de agua caliente hay que tener en cuenta varios factores muy importantes:

• El tipo de vivienda donde se instala.
• El clima del lugar.
• El uso que se le dará: esporádico o contínuo.

Por lo que existen dos sistemas para generar el agua caliente, denominada técnicamente agua caliente sanitaria, en nuestros hogares:

• Sistemas instantáneos
• Sistemas por acumulación

Cada sistema tiene sus pros y contras, vamos a verlo a groso modo para que te hagas una idea.

Los sistemas de agua caliente instantánea

El agua se calientan en el momento en que se demanda. Ejemplo: calentadores de gas o eléctricos…

La principal ventaja: 

• no se necesita mantener el agua caliente acumulada
• ocupan poco espacio

 Sus inconvenientes:

• la cantidad de agua y energía desperdiciada hasta que el agua alcanza la temperatura deseada.
• así como el aumento del consumo y el deterioro del equipo cada vez que se enciende y apaga el equipo cuando hay demanda.

Por lo que este tipo de sistema es el más apropiado para familias con pocos componentes, en viviendas no habituales o en aquellas dónde su uso es muy puntual.

 Un ejemplo son los calentadores eléctricos, los mismos tienen muy poco aislamiento y mucha potencia. Por ese motivo son recomendados para uso esporádicos o puntual.

Los sistemas de acumulación

Tenemos varios sistemas: caldera y acumulador de agua (son los más usados), y los termoacumuladores de resistencia eléctrica (costes e instalación altos).

La opción de caldera y acumulador se compone de:

• un equipo que calienta el agua ( una caldera, una bomba de calor…)
• y un acumulador de agua

Una vez calentada el agua, se almacena en depósitos de agua aislados para que pueda usarse en cualquier momento. Opcionalmente, a  estos depósitos se  les pueden instalar una resistencia eléctrica de apoyo.

Ventajas:

• se evita los continuos encendidos y apagados del calentador, ya que trabaja de forma continua. 
• son fácilmente combinables con los sistemas de captación solar, por lo que favorece el ahorro energético, y por tanto, económico para su propietario 

Se recomienda este sistema cuando se sabe de antemano que el consumo de agua caliente puede ser constante.

Desventajas:

• el considerable coste de la energía.
• el espacio ocupado por el depósito.

Y la opción de  termoacumuladores de resistencia eléctrica. Son un sistema poco recomendable desde el punto de vista energético y de costes. Su funcionamiento es el siguiente: cuando la temperatura del agua alojada en el termo baja de una determinada temperatura, entra en funcionamiento una resistencia auxiliar. Por lo que es muy importante que el termo esté bien aislado. Además, de que sólo entre en funcionamiento cuando sea necesario, mediante un reloj programador….

Otros sistemas

Como no, existen otros sistemas. Por ejemplo, los tipos mixtos, que combinan los dos sistemas anteriormente mencionados: el sistema por acumulación con el sistema de producción instantánea.

Estos sistemas mixtos, disponen de un calentador y un depósito de menor capacidad. Y su precio depende de la potencia y capacidad de acumulación del depósito. Pueden funcionar con gas natural, butano o propano.