Los LED han arrasado en el mercado de la iluminación convencional por muchas razones, entre las que destaca su mayor vida útil, su menor consumo de energía y sus menores requisitos de mantenimiento.
Para 2030, se estima que la iluminación LED podría ahorrar 190 teravatios hora de electricidad por año, lo que equivale a la friolera cantidad 15 mil millones de dólares.
Y es que cada vez más administradores de instalaciones buscan actualizar sus sistemas de iluminación con LED, como las campanas LED o luz led en tu cocina o en los salones dados sus beneficios en todas las instancias de la casa, en comparación con las tecnologías tradicionales.
Eficiencia energética
Las luces LED usan aproximadamente un 50 por ciento menos de electricidad que las opciones tradicionales incandescentes, fluorescentes y halógenas, lo que resulta en ahorros sustanciales de costos de energía, especialmente para espacios con luces que están encendidas durante períodos prolongados, como puede ser en la cocina.
Los LED también dirigen la luz en una dirección específica a diferencia de las bombillas convencionales, que emiten luz y calor en todas las direcciones. Esta capacidad de iluminación direccional reduce el desperdicio de luz y energía.
Vida más larga
A diferencia de la iluminación incandescente, los LED no se «apagan» ni fallan, simplemente se atenúan con el tiempo. Los LED de calidad tienen una vida útil prevista de 30.000 a 50.000 horas o incluso más, según la calidad de la lámpara o el dispositivo.
Una bombilla incandescente típica dura sólo unas 1.000 horas, mientras que un fluorescente compacto comparable dura de 8.000 a 10.000 horas. Con una vida útil más larga, los LED pueden reducir los gastos laborales de reemplazo de bombillas en situaciones comerciales.
Baja temperatura
Los LED aman el frío a diferencia de las lámparas fluorescentes. A bajas temperaturas, se requiere un voltaje más alto para encender las lámparas fluorescentes y el flujo luminoso disminuye. Por el contrario, el rendimiento de los LED aumenta a medida que bajan las temperaturas de funcionamiento.
Durabilidad
Sin filamentos ni cerramientos de vidrio, los LED son resistentes a las roturas y en gran medida inmunes a las vibraciones y otros impactos. La iluminación tradicional generalmente está contenida en un exterior de vidrio o cuarzo, que puede ser susceptible a daños.
Los LED, por otro lado, tienden a no usar vidrio, sino que se montan en una placa de circuito y se conectan con cables soldados que pueden ser vulnerables al impacto directo, pero no más que los teléfonos móviles y pequeños dispositivos electrónicos similares.
Encendido instantáneo
La mayoría de las lámparas fluorescentes no proporcionan un brillo total en el momento en que se encienden, y muchas requieren tres minutos o más para alcanzar la salida máxima de luz. Sin embargo, los LED se encienden con un brillo del 100 por ciento casi instantáneamente y sin demora. Esto puede ser ventajoso después de un corte de energía o en cualquier momento en que los empleados abran un edificio durante las primeras horas de la mañana cuando todavía está oscuro en el exterior.
Por todos estos motivos, la luz led en tu cocina u otra estancia de tu hogar, son totalmente recomendables.